28 de marzo de 2023
Las comunidades energéticas son, para muchos expertos, el futuro de una sociedad más consciente de su responsabilidad con sus miembros y su entorno. Estas agrupaciones de personas afines comparten la producción y uso de la energía alternativa como una forma muy beneficiosa de convivencia. Veamos en qué consisten.
Las comunidades energéticas se están haciendo cada vez más numerosas en muchas regiones mundiales. Su propósito principal es agrupar vecinos, empresas, industrias o habitantes de una localidad en torno a la generación energética de mayores y mejores beneficios comunes.
Lo que ha nacido como una iniciativa muy puntual en determinadas regiones del mundo que conviven de forma más aislada, se ha extendido globalmente. Aunque hay cientos de tipos de comunidades energéticas con distintas características intrínsecas, las une un factor común: la búsqueda de alternativas sostenibles, ecológicas y que sumen beneficios para todos.
Hay comunidades energéticas basadas en la generación energética hidroeléctrica, eólica y de biomasa. Sin embargo, las comunidades basadas en la energía solar son las más popularizadas.
En nuestro país, las comunidades energéticas han experimentado un auge exponencial a raíz de tres eventos significativos:
En nuestra imaginación, el concepto de comunidades energéticas puede estar más asociado a comunidades rurales o aisladas. No obstante, en las ciudades más cosmopolitas y modernas de España, las comunidades energéticas son hoy en día, una realidad tangible.
Veamos algunas consideraciones importantes sobre este concepto energéticamente sostenible, económicamente rentable y de gran confort para sus miembros.
Analizaremos qué son, cómo funcionan y, sobre todo, cómo puedes transformar tu comunidad en una comunidad energética.
Básicamente, las comunidades energéticas son grupos de personas, empresas o asociaciones de vecinos unidos para compartir y gestionar su energía. Dentro de estas comunidades, se instalan formas de producción, consumo y distribución de energía renovable de forma colaborativa.
Personas que comparten un mismo edificio, barrio o localidad, se unen para desarrollar soluciones energéticas sostenibles y así reducir su dependencia de los combustibles fósiles. De esta forma, no sólo distribuyen el coste de manera colectiva sino que aprovechan los beneficios de la producción energética de una manera mucho más horizontal. En muchas regiones del mundo se han instalado proyectos comunitarios para:
Pero, es la instalación de paneles solares en tejados, patios o zonas comunitarias la que lleva la delantera en los proyectos de energías comunitarias en el mundo entero. Desde industrias que comparten parques industriales o polígonos a empresas que comparten edificios o comercios de un mismo centro comercial.
Asimismo, se han desarrollado proyectos en edificios residenciales, conjuntos urbanísticos en todas las escalas y barrios enteros que funcionan bajo este principio.
Adicionalmente, las comunidades pueden gestionar y administrar los excedentes de energía generada a través de una red local. Esto les permite a sus miembros obtener beneficios económicos que se pueden invertir en proyectos secundarios muy provechosos para la comunidad.
Las comunidades energéticas son una de las mejores formas de facilitar la transición hacia un consumo más sostenible. Además, se crea mayor integración entre los miembros en pro del bien común a corto, medio y largo plazo.
La unión de individuos en torno a una comunidad energética reduce significativamente las inversiones y da un mayor poder de negociación a la comunidad. Esto redunda en mejores condiciones económicas, técnicas y logísticas en comparación con las instalaciones aisladas.
¡Instala placas solares y ahorra cada mes en tu factura de electricidad!
¡Descubre el potencial de tu tejado en 1 minuto!
Michael Porter, uno de los mayores expertos en negociación, describe cómo las comunidades incrementan su poder de negociación en pro de sus miembros. La sinergia, es decir, el todo es más que la suma individual de sus partes, se aplica en las teorías de Porter. Pero, además, se aplica de manera destacada en la creación de comunidades energéticas.
Una comunidad de vecinos, una barriada o un polígono industrial tendrá una mayor ventaja a la hora de negociar precios y condiciones. Una comunidad energética puede fijar precios de insumos, tarifas de instalación y precios de la energía devuelta a la red con mejores condiciones.
Por otro lado, las comunidades energéticas pueden desarrollar planes y proyectos de energía de mayor innovación, aplicación y beneficios. Estos proyectos serían imposibles de poner en práctica de forma individual.
En muchas regiones del mundo, las comunidades energéticas han sustituido la fuente de energía de pueblos enteros con costes individuales mínimos. Igualmente, han invertido el ahorro energético y los beneficios de excedentes en proyectos comunes de gran impacto social, económico y urbano.
En ACCIONA Energía confiamos en que el desarrollo de comunidades energéticas será más pronto que tarde una realidad patente en toda España. Los beneficios del desarrollo comunitario frente a las individualidades son más que evidentes y creemos firmemente que serán muy extendidos.
Tu barrio, tu edificio o tu pueblo se puede transformar en muy poco tiempo en una comunidad energética. ACCIONA Energía te acompaña en todo el proceso con la máxima asesoría y los estudios técnicos más profundos y personalizados para tu comunidad.
"*" señala los campos obligatorios
gratuito y en 48 horas
"*" señala los campos obligatorios
"*" señala los campos obligatorios
Solicita tu estudio
gratuito y en 48 horas
"*" señala los campos obligatorios
SOLUCIONES PARA TU HOGAR
SOLUCIONES PARA TU EMPRESA